Maestros y maestras normalistas en defensa de los derechos laborales

Boletín No. 1. MAGISTERIO
 Por Leonor Warlock y Tonatzin

En los últimos años se ha venido dando una política neoliberal de desprestigio hacia la educación básica, cuyo fin es el desmantelamiento de la educación pública, y la desaparición de algunas normales rurales; así como la reducción de los derechos laborales de los trabajadores del gremio, tanto en las escuelas normales como en todo el nivel básico, donde la lideresa del SNTE : Elba Esther Gordillo Morales ha atribuido adjetivos negativos a las normales como “nidos de guerrilleros”, “grilleros”, “disfuncionales para formar maestros de calidad”, ésta última declaración realizada en el 5to Congreso Nacional de Educación y Tercer Encuentro Nacional de Padres de Familia, dónde asegura que las normales son “monstruos de desempleados”, sin reconocer su educación normalista forjada en estas instituciones mismas que son las capacitadas para formar docentes especializados en materia educativa con plenos conocimientos pedagógicos. Tal situación responde al contexto político y económico donde el gobierno se ha encargado de empeorar las condiciones laborales y reducir el gasto público a consecuencia de la crisis.... Sigue

Esta ofensiva ya venía de años atrás con la reforma al artículo 3° de la Constitución Política y a la Ley General de Educación en 1992, pero es hasta 2008 cuando se pactó una de las medidas más reaccionarias contra los trabajadores, los derechos de los egresados normalistas y la educación pública a nivel básico y normal; la llamada Alianza por la Calidad de la Educación (ACE) cuyo propósito es subordinar al máximo a los que colaboran en la tarea educativa, sometiendo a mecanismos de control mediante la evaluación universal, realizada por estancias privadas como el CENEVAL y que más que apuntar a mejorar la calidad, han sido utilizadas para desprestigiar y atacar constantemente al magisterio reduciendo y desapareciendo sus derechos, que han sido ganados con la lucha de estudiantes y trabajadores.

Uno de los ejes de esta lasciva política, se encuentra en el Concurso Nacional de Otorgamiento de Plazas; dicho examen ha impactado negativamente de manera directa en la inserción al campo laboral de los egresados normalistas, pues la vía para la inserción a plazas era de manera directa - derecho conquistado por la lucha de normalitas-. Ahora, esta conquista ha sido liquidada, con en el examen que no es más que un filtro por el cual se limita el ingreso y la adquisición de una plaza que garantice el empleo, orillando a ínfimas condiciones con el nuevo código 23 (contrato inferior a seis meses) y cuyo propósito es evitar la basificación y obligar a realizar el examen cada año.

Es por esto que en 2010, un conjunto de egresados de la Escuela Normal Superior de México conformamos un comité, el cual se movilizó a la estancia encargada de la asignación de plazas con la finalidad de que se respetara el ingreso al servicio docente. Entre las exigencias se encontraban la contratación plena de los egresados en condiciones que permitieran la adquisición de una plaza definitiva; sin embargo y pese a los esfuerzos realizados, las autoridades incumplieron el acuerdo al momento de la contratación, orillando a varios compañeros a tener contratos temporales de tres a cinco meses y sin oportunidad de prorrogar al llegar a una fecha determinada, lo cual hoy impacta pues estos compañeros se ven obligados a realizar el examen nuevamente sin ninguna otra opción para preservar el empleo.

Como lección, consideramos que es fundamental que surja un gran movimiento de normalistas, egresados y maestros en servicio para luchar por nuestro derecho al trabajo y retomar las mejores tradiciones de lucha del magisterio.

Hay que luchar por la basificación universal

Entre otras cosas, la ACE ha liquidado la conquista obtenida durante la lucha de los normalistas de acceder a una plaza para ejercer su profesión.

Muchos compañeros, nos vemos obligados a aceptar contratos eventuales, que es el caso de los maestros que son código 23, con el riesgo permanente de perder nuestro trabajo. Producto de ello, algunos compañeros en esta situación, nos hemos venido organizando para pelear por nuestro derecho al trabajo.

Las autoridades de la SEP en contubernio con los dirigentes del SNTE, tratan permanentemente de dividirnos, otorgando plazas discrecionalmente y manteniendo a centenas en la cuerda floja.

Por eso pensamos que debemos organizarnos unitariamente, tanto los compañeros egresados como los maestros que ya estamos en servicio e impulsar un movimiento de lucha por la basificación universal para todos los maestros, por echar abajo el examen de selección acordado por el gobierno con Elba Esther Gordillo y porque todos los compañeros podamos ejercer nuestro derecho al trabajo.

De ahí que estamos llamando a los compañeros normalistas y los maestros a dar una pelea en común, con un pliego unificado de reivindicaciones que impulse la movilización contra la ACE y por la apertura de bases para todos.

Estamos tratando de constituir un comité por el derecho al trabajo, convocando a reuniones abiertas donde podamos democráticamente cómo impulsar esta lucha

¡Viva la unidad de normalistas y maestros en servicio! 

¡Basificación universal a todos los egresados y maestros! 

¡Por la defensa de la educación pública y gratuita! 

¡Abajo el examen de selección! ¡Abajo la ACE!