BOLETÍN No. 2 / MAGISTERIO
Por Jorge Morales
En la presentación del pasado debate presidencial, el candidato del PANAL, Gabriel Quadri, se afirmó como un ciudadano y empresario que trabaja por México. Este candidato intervino sin parar alrededor de implementar mayores privatizaciones, apuntando hacia PEMEX, pero también habló de la necesidad de recrudecer la intervención del ejército en las calles, llevar a un enorme crecimiento de los efectivos de la policía federal, hacer más duras reformas como la laboral y la creación de más impuestos; en pocas palabras este político-empresario, presentó un programa completamente ajeno a los sectores empobrecidos de México, profundamente anti obrero, dándole un papel preponderante al empresariado nacional y extranjero como generador de riquezas y de empleos, algo notable tomando en cuenta que su discurso reaccionario contrasta con la exigencia de miles de maestros que se manifestaron en contra de la ACE. Esta aparente contradicción se sustenta en que el PANAL se formo a partir de una poderosa burocracia sindical que mantienen otros intereses, pero no fue formado por la base magisterial.
Para Quadri, según lo expuesto en el debate, los empresarios deben administrar todos los recursos públicos “para hacerlos funcionar” y así cobrar por estos a los trabajadores y sus familias. Sin embargo, las posiciones pro empresariales de este candidato no las levanta solo, es todo un acuerdo político con los dirigentes de su partido; las recurrentes alusiones a la importancia de resaltar el papel de los empresarios en la historia de México como figuras y generadores de riqueza, muestra la verdadera cara de la dueña de este partido, Elba Esther Gordillo, dejando muy claro que los intereses de Gordillo van en contra de las necesidades de millones de maestros que nada tenemos que ver con el PANAL. Gabriel Quadri es la voz de los empresarios, no de los trabajadores de la educación, es la voz de los empresarios que exigen mejores condiciones de explotación y que están molestos porque hasta ahora no han podido lograr que se realicen todos los acuerdos a los que se había comprometido el gobierno para con los inversionistas extranjeros.
Este programa que levanta el candidato del PANAL, es la verdadera cara de Elba Esther Gordillo, es lo que no puede decir ante los micrófonos, pero que da una muestra de sus verdaderas intenciones cuando firmó con el panismo la ACE y que tiene pleno acuerdo en que el país se mantenga bajo los parámetros de ataque contra los trabajadores y en especifico contra los maestros de México. Es notable que todos los trabajadores del magisterio sabemos que el PANAL no es un partido que nos represente, pero sin embargo es la alta burocracia del SNTE la que dirige a este partido en nombre de la educación.
Y si no representa los intereses de los maestros ¿por qué los charros del SNTE imponen a los trabajadores de la educación el reparto de su propaganda? ¿Por qué las campañas del PANAL son financiadas con recursos del Sindicato que pertenecen a la base trabajadora? La utilización del sindicato de maestros como un botín político para venderse al mejor postor, algo en lo que Elba Esther Gordillo tiene bastante experiencia y que resulto en la creación del PANAL y sus múltiples alianzas, nos deja la lección de que la burocracia del SNTE no representa las demandas de los millones de maestros de México, al contrario, impulsa los planes del gobierno en turno en contra de los intereses de la base magisterial. Los trabajadores somos tratados como monedas de cambio, como lo vemos en este periodo electoral, es por ello que debemos oponernos a que nuestros sindicatos se hagan parte del juego de los partidos patronales como el PAN, PRI y PRD y debemos pelear por la total independencia política y organizativa de nuestros sindicatos de estas alianzas. Debemos oponernos a que nuestras organizaciones sean utilizadas en estos periodos electorales para llenar el botín de un partido patronal y de dirigentes sindicales como Elba Esther Gordillo. Por ello nos oponemos a que en estas elecciones sea utilizado el SNTE como sustento militante y económico a un partido que no nos representa y que no levanta un programa en contra de nuestros explotadores y en contra de los que nos imponen la ACE y todo el ataque a nuestras condiciones laborales y nuestras conquistas que está significando su implementación.
Los trabajadores no tenemos representantes en estas elecciones, pero para poder tenerlos y que sean auténticos tribunos de nuestra clase y de nuestras demandas más sentidas, debemos romper con toda influencia y acuerdos a los que nos atan los partidos que representan los intereses de la burguesía, de lo contrario seremos rehenes de los intereses de grupos políticos que buscan las vías para gobernar a favor de unos cuantos y perjuicio de millones de asalariados en el país, tal cual hoy se presenta el PANAL y su derechista candidato Gabriel Quadri. Para ello, es fundamental seguir luchando por la recuperación de nuestro sindicato, su democratización y por la más absoluta independencia política de nuestra organización.
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